Incendios forestales, escasez de agua, sequías… Este verano, la crisis climática que atraviesa la humanidad nos ha golpeado en nuestra propia casa y las personas con menos recursos están siendo las más afectadas. Ante esta situación, en lugar de tomar medidas para paliar las consecuencias, Olaf Scholz (SPD), el autodeclarado “canciller del clima”, pretende debilitar uno de los mecanismos más importantes para frenar el cambio climático: la Ley de Protección del Clima. De hecho, ha dado vía libre al FDP para eliminar y bloquear eficaces políticas para la protección del clima. Y mientras el gobierno de coalición está preocupado por cuestiones internas, los tabloides como el Bild, alentados por el grupo CDU/CSU,tratan de seguir polarizando a la población sembrando el miedo hacia estas políticas que tan urgentemente necesitamos.

No podemos permitir que aquellos que tratan de sabotear y de infundir pánico contra estas medidas tomen la delantera en esta batalla. Tras el descanso del verano, el gobierno debe ponerse manos a la obra y avanzar, pero en los últimos años, solo hemos conseguido progresos en cuestiones climáticas cuando cientos de miles de personas se lo han reclamado. Por este motivo, el 15 de septiembre tomaremos las calles y participaremos en la huelga nacional convocada por Fridays for Future. Gente de todas las edades y condiciones sociales nos reuniremos en cientos de lugares de Alemania para protestar y exigir unas políticas de protección climática con más justicia social que cumplan su responsabilidad con el planeta.

Exigimos al gobierno federal de Alemania que:

• Endurezca la Ley de Protección del Clima con objetivos vinculantes por sector que especifiquen la cantidad de emisiones de CO₂ que debe reducirse cada año.
• Acelere la transición para abandonar el carbón, el gas y el petróleo. Ahorrar energía y pasarse a las fuentes de energía limpia requiere un esfuerzo mucho mayor. El mundo entero debe dejar de explotar recursos fósiles y de apoyar este tipo de proyectos.
• Lleve a cabo una reforma integral del sistema de movilidad. En lugar de invertir miles de millones de euros en aumentar la red de autopistas, el gobierno debe priorizar las alternativas al automóvil, como garantizar un servicio funcional de autobuses y trenes y una infraestructura ciclista segura, tanto en áreas urbanas como rurales. Asimismo, debería implantar un SozialTicket nacional para garantizar la movilidad al conjunto de la ciudadanía, acabar con los subsidios perjudiciales para el clima (como los injustos privilegios de los que goza el automóvil de empresa) y fijar un límite de velocidad en las autopistas.
• Descarge de presión a las personas de bajos recursos con el bono climático prometido. Además, una mayor presión fiscal a las emisiones de carbono, a los beneficios derivados de los combustibles fósiles y a la extrema riqueza también ayudarían a equilibrar la balanza. Este tipo de medidas podrían favorecer la justicia social y servirían para contrarrestar la emergencia de las ideologías de ultraderecha.
• Aumente el apoyo a los países del Sur global, que se llevan la peor parte del calentamiento global, para ayudarlos a combatir eficazmente la crisis climática. Alemania debe asumir su responsabilidad en el calentamiento global y destinar fondos para reparar los daños causados por la crisis climática en el Sur global.

Queremos un gobierno que respete los objetivos climáticos con los que se comprometió. Si todos y todas, jóvenes y mayores, salimos a la calle, podemos conseguirlo. El 15 de septiembre, busca tu grupo más cercano y participa en la huelga nacional por el clima de Fridays for Future.

#FridaysForFuture
#EndFossilFuel
#Klimastreik1509